Certamen del jardín

Bordeado de botellas retornables
que cubren varillas irregulares,
peines del viento
que quieren rasgar las nubes,
se extiende el gran estadio del jardín.

Adentro, acrobacias de sonidos,
pájaros atletas haciendo extensiones,
pájaros de piar maratonista
pájaros de saltos sobre garrocha
que ascienden y caen desesperados
por no alcanzar las nubes.

Plegados en las gradas de las rejas,
la gran masa verde del público
prefiere la alegre contemplación,
evade el protagonismo, su angustia
y Ella, como el público multiforme del pasto,
queda impávida, sonriente,
ante el espectáculo.




No toda la tierra

No toda la tierra es provechosa
hay tierra demasiado blanda, inestable
que tiene vocación de remanso
tierra lenta que se entretiene abriendo
uno a uno, los pétalos encendidos
de las flores silvestres,
tierra que regala al paseante
algunos frutos maltrechos,
y a quien la mira,
el ignorado fruto
del verdor y el consuelo.



Atardece

Atardece tan pronto
tan inesperadamente
en este andar intranquilo
y vemos        solamente
un dorado resplandor
tan hermoso, tan breve
un sol que exhala su brillo
en el borde de la noche
entre las copas de árboles
bendecidos.