Cuerpos aparte / No. 236
Todo el mangle
1
Todo el mangle y sus signos al acecho,
contornos que se buscan en sustratos
de un estuario invadido por el mar.
Estuario que reclama ahondar en lo profundo de los dos,
dos amantes que danzaban en las llamas,
llamas de una hoguera apenas soñada.
Un mapa de raíces transmutadas es trazado, raíces aéreas
en la región del movimiento donde se besan los amantes,
amantes quiénes,
amantes escondidos de la sal
entre los suelos y el follaje del manglar.
2
Todo el mangle se ancla en nuestras manos
cubiertas de humedad. Ascenso del nivel del mar,
frecuencia de tormentas tropicales y huracanes;
árboles que crecen dentro de su propia sombra
donde no hay eternidad ni destella la arena,
donde yacemos frágiles entre sollozos y lodo.
3
Todo el mangle y sus formas de quietud,
formas que alcanzan la orilla de los días.
Silencio,
el más profundo, ese que nos hizo recorrer la costa
y nos expuso desnudos en la tierra removida
donde habitan las serpientes.
Así cabíamos en el mundo:
inundados y húmedos, densos cuerpos de agua
atravesados por la mudez, por la espuma