Punto de partida celebra en este número el resultado de nuestro Concurso 35: diez premios y diecinueve menciones, seleccionados entre más de setecientos trabajos participantes.
Después de tres convocatorias y catorce números editados en esta sexta época de la revista, es tiempo de cosecha: la participación de estudiantes en el Concurso se ha incrementado notablemente, así como la recepción de colaboraciones, lo que da fe del interés de los universitarios en hacer suyo este espacio en tiempos por demás difíciles para las manifestaciones culturales. Además, algunos de los premiados y colaboradores en números recientes han seguido esta carrera ardua: unos han ganado certámenes literarios a nivel nacional, otros publican ya en suplementos culturales, y otros más ilustran profesionalmente las páginas de libros y revistas. El trabajo de todos ellos es testimonio vivo de que Punto de partida sigue fiel a su tradición: ha sido y es un canal de expresión de la creatividad universitaria, el punto de partida de carreras notables, el semillero de creadores cuyos nombres reconocemos entre los hacedores de nuestra literatura.
El número que hoy ve la luz presenta la primera entrega de ganadores en el Concurso 35: “Los pasos del visitante”, trabajo poético de sobria precisión, obra de Luis Paniagua; “El suicida”, relato de Rodrigo Martínez que se mueve con consistencia entre lo real y lo imaginario; “Evolución volátil”, propuesta fotográfica de extraordinarias coherencia y factura, de Sausi Rhi Lozano; “Gracy”, fragmento de novela de Edwin Alcántara, narrado con fluidez y cuidado estilo, y “Real de Catorce, la urbe azul”, crónica de Roberto Torres que recrea hábilmente el ambiente de un concierto de blues.
Incluimos también, en El Árbol Genealógico, “Instantes del pasado israelí”, dos pequeños relatos de Marco Antonio Campos, reconocido escritor que es parte de la historia de esta publicación: fue jefe de redacción de 1973 a 1980, con Eugenia Revueltas, y director de la misma de 1981 a 1988. Agradecemos su regreso a Punto de partida. Y en nuestra sección de reseñas, Víctor Cabrera presenta a un narrador sorprendente: el catalán Quim Monzó.
A manera de despedida, vayan nuestras felicitaciones a todos los ganadores del Concurso literario y gráfico de Punto de partida y nuestro reconocimiento a la labor de los miembros del jurado, que generosamente aceptaron participar con nosotros.
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