No. 123/POESÍA

 

Dos poemas 



César Terrero Escalante
INSTITUTO DE FÍSICA, UNAM



cesar-terrero-escalante1.jpgCausa del sueño

Abrazada la causa del héroe del hígado tierno
sobre la roca encendida, piedra egoísta y propicia,
en las puertas de la noche vociferan los guerreros.

Portando el fuego de todos asedian al ojo insomne,
nuevo padre, vieja esposa, dura razón del desquicio
regresando lastimero, destrozada turbulencia.

Les contempla paternal y comprensivo pero vierte
diestro el vino en las gargantas aletargadas y secas,
colmando el hoyo del juicio con leche falsificada.

Dormirán en las cazuelas, en el fondo de los pozos
donde el hereje diluye sombras de gritos silentes
y en la próxima fase lunar buscará el desconcierto.



Certidumbre

Hoy lo único cierto es la arrancada,
el tiempo con lumínico andar escapando del juego.

Todo es matas de plátanos, sol desbocado y mosquitos
y castillos nevados en lo alto de Sajonia.
Alguien dice que vale la pena
explorar el interior de los volcanes
y comienza la búsqueda del último minuto.

Sonó el disparo, es posible
que se pierdan los pasos
remedando un bongó en la Novena Avenida,
o en la novena posesión del Amazonas.
Tanto mejor si se perdieran en la Novena Sinfonía,
Ahogados en madera de oboe.

Vuelve la náusea a pasear por públicos, bellos jardines.
cesar-terrero-escalante2.jpg Vuelve a estar de más, como todos:
todos los versos arañados por los soles,
la lluvia, la ventisca y las soledades
de veinte años, casi nada
más que el regrese de pájaros
disímiles al mismo nido.

Así, la aristocracia de una fuente hermosa
regresa en porcelana para té mentolado.

 
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Dibujos de David Becerra, Tecnológico de Monterrey, Ciudad de México