EDITORIAL/No. 177


 

Iniciamos 2013 con una edición mixta. Por un lado, la muestra de poetas jóvenes de España preparada por Ana Franco Ortuño, y por el otro, un fuerte cuerpo misceláneo que incluye tres piezas narrativas: “Indocumentado”, cuento de Édgar Omar Avilés, ganador del Premio Binacional México-Québec sobre migración; “El cobre”, cuento de Rogelio Pineda, y “Conversaciones”, una colaboración de Diego Salas que hemos dado en categorizar como relato pero que hibrida varios géneros, tendencia cada vez más visible en la nueva literatura. Además, publicamos la presentación de Eduardo Uribe al libro El sendero frugal, antología de poesía del francés Jacques Dupin, seleccionada y traducida por Iván Salinas. En su texto, Uribe llama la atención sobre la labor del traductor, que es la suya también. Nos conduce entonces a hablar ya no de la poesía de Dupin sino del Dupin de Iván Salinas, y nos introduce así a algunos de los poemas incluidos en esta coedición de Hotel Ambosmundos y la Secretaría de Cultura de Puebla.

En números anteriores hemos publicado muestras dedicadas a regiones españolas específicas —Andalucía, Castilla—. Esta vez, Ana Franco Ortuño conjunta a nueve jóvenes autores que nos dan una idea general del quehacer poético del país. Opta en su presentación por un glosario de términos relacionados con la generación antologada (blog, cine, ficción, infancia…), y debo decir que pocas veces he visto una descripción tan clara y precisa de una muestra. La forma elegida por Franco Ortuño se presta para diseccionar los temas y retrata de manera sucinta los pormenores y las características que confluyen en este grupo de poetas nacido entre 1980 y 1990.

En cuanto a las artes visuales, esta edición abre, en el Árbol Genealógico, con la reproducción de tres obras del pintor, dibujante y grabador Sergio Ricaño: “Coloso” (ganador de la Bienal Takeda 2012), “Flotación” y “Gigante urbano” (mención honorífica en la Bienal Zalce 2011). Agradecemos a Ricaño su generosidad al facilitarnos este material espléndido, y la recomendación de la joven artista cuyo portafolio ilustra el número: Laila Torres-Mendieta, quien presenta parte de su proyecto Las rabiosas. Combinando dibujo, monotipo y animación como base de la experimentación gráfica, Torres-Mendieta realiza una serie de imágenes que retoman la estética de la novela gráfica, las películas softporn y el manga japonés para enfrentarnos con ciertos estereotipos de fuerte arraigo en el imaginario sexual masculino. Un trabajo notable que transcurre por las páginas de este número de año nuevo. Para cerrar, también en el campo de lo visual, Christian Barragán analiza el trabajo de Fernando Ortega expuesto en la Galería Kurimanzutto.

Feliz 2013.


Carmina Estrada