un mamífero artiodáctilo de la familia Suidae
(un sus scrofa domesticus)
no puede mirar al cielo
El guardia de seguridad discute
cuánto cobrarán por lo que está roto
afuera
Se me recomendó no salir de casa
no hablar con extraños
no hablar como si
por azar alguien entendiera una palabra
No quiero volverme loca tan pronto Antes quiero hacer otra cosa como hablar con extraños y salir de casa Antes quiero hacer otra cosa como morirme pronto No quiero estar loca porque las puertas son duras y mis pies sangran y no hay redención No quiero estar loca porque mis pies sangran.
Hay mucho que hacer ahora,
mañana
Hay mucha gente afuera
como para no salir nunca de la casa
Hay demasiada gente Y mi cuerpo es un búnker de carne y sangra como el ganado y se mezcla por un momento con los otros cuerpos, cuando ha muerto y ha viajado hasta una otra casa donde se cierran también esas puertas duras contra las que pateo.
Con furia.
Ahora
estoy más tranquila
sangro
vivo, miro cómo sangro
mi cuerpo empieza a doler en partes
no he tumbado ninguna maldita puerta de esta casa
Estoy joven todavía
para tantas cosas
como tener miedo de que la gente haga cosas
de que la gente me mire partir y entrar a casa y sepa dónde vivo
de qué color es mi cabello y cómo lloran los cerdos ¡cómo lloran!
qué dolor tan semejante al sabor de la carne del hombre.
Mi hacha se llama dinero mi hacha se llama dólar porque todos la comprenden
Mi hacha es una amante rubia y amorosa, uh
No todos los brillos son iguales
No todo el dinero es maldito
No todos los hombres son malos y matan
No todo silogismo es acertado
La tranquilidad
La tranquilidad es siempre la muerte de algo: la tranquilidad (sonrío, como diciendo: tengo razón, probablemente) la tranquilidad (ojalá todos desaparecieran) es estar aquí, inmortal porque en realidad nunca se ha terminado de nacer,
de engendrar siquiera alguna cosa.
Afuera se discute cuánto por lo que está roto afuera.
Cuánto.
*
Da tristeza pensar en la emoción de un puerco
cuando su corazón sirva al corazón humano
en la tristeza de un corazón de puerco cubriendo un agujero
sepultando el pecho de las otras emociones
oye
Todas las escritoras se vuelven locas
y las encierran
y las encierran sin excepción.
[…]
Todas las escritoras morirán
morirán solas
con sus respectivos lujos
y cantidad de gatos o de sangre
respectiva
[…]
Todas morirán porque son
hombres
los hombres mueren
y a veces
aunque sea verdad
no lo parece.
ey Charles, ese asesino es sexy
Hablaban hace años exactos
ante la comodidad de otro siglo
del futuro
de la poesía
un par de genuinos
enamorados secretamente del pasado
como ahora
El futuro de la poesía era el cáncer
(nos asusta pero)
todos tememos que nos arrebaten algo.
Xel-Ha López Méndez. Estudió Letras Hispánicas en la Universidad de Guadalajara. Ha ganado varios certámenes nacionales de poesía. Es autora de los libros inéditos A mis nuevos amigos inmortales (Premio Jorge Lara 2012) y Cartas de amor para mi amigo cerdo (2014). Es cofundadora de las revistas La Cigarra y La jardinera guarrior. Fue becada por la Fundación para las Letras Mexicanas en el Curso de Creación Literaria Xalapa 2011 y 2012. Es parte del consejo editorial de la revista Metrópolis. Ha sido incluida en antologías en México y Venezuela. Ha publicado en las revistas y fanzines Anders Behring Breivik, Simulacro, Replicante, Metrópolis, La jardinera guarrior y en los blogs Poetas del nuevo milenio, Órfico, Transtierros, Letrina, 10avenida, entre otros.